Las Serranías. Moriscos y Mozárabes
Esta ruta combina ciudades (Málaga, Antequera, Ronda) con pequeños pueblos serranos, cuyos nombres, fisonomía y arquitectura popular recuerdan la presencia musulmana y morisca.
En Málaga destaca la Alcazaba (s. IX-XI), coronada por el Castillo de Gibralfaro. Testimonio de su importancia marinera en tiempos de Al Andalus es la Puerta de las Atarazanas (nazarita).
Antequera también enseña su Alcazaba (s. XIV) y Álora restos de su castillo.
El camino hacia Ardales está lleno de abruptos parajes: Garganta del Chorro, Desfiladero de los Gaitanes. En ellos se emplazan las ruinas de Bobastro, la ciudad que sustentó la revuelta mozárabe contra el estado cordobés (s. IX-X).
En Ronda pueden admirarse parte de sus defensas (murallas, torres, Puerta de Almocábar), restos de sus mezquitas (Colegiata de Santa María la Mayor, Iglesia de San Sebastián), y sus Baños Arabes. Desde allí pueden visitarse El Burgo, Igualeja y Parauta (las torres de sus iglesias son alminares) o, atravesando los pueblos moriscos que se alzaron contra Felipe II, subir a los castillos de Benadalid - hoy da cobijo a su cementerio- y Gaucín.
El segundo itinerario pasa por Vélez-Málaga (Alcazaba) y se interna en los pintorescos pueblos de la Axarquía, donde se levantan una serie de alminares (s. XII-XIV) en las iglesias de Archez, Salares, Arenas de Vélez, Corumbela, Daimalos y Benaque.
Itinerarios
- Itinerario 1: Málaga - Antequera - Álora - Ardales - Ronda - Benadalid - Gaucín
- Itinerario 2: Málaga - Vélez-Málaga - La Axarquía